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Esta es una añada muy especial, porque estrenamos nuevo diseño para nuestras etiquetas, un gran trabajo de la prestigiosa agencia alemana Ruska Martín Associates. Un homenaje a los bellos jardines de nuestra casa en Irache, diseñados por nuestro bisabuelo hace más de 100 años.
TIPO: Tinto
COSECHA: 2010
VIÑEDO: 100% uva propia, proveniente de Pago de Larrainzar, 17 ha.
VARIEDADES: Merlot 50%, Cabernet Sauvignon 30%, Tempranillo 10%, Garnacha 10%.
FECHA DE VENDIMIA: Merlot: 14/10/10; Garnacha 27/10/10; Cabernet Sauvignon 29/10/10; Tempranillo: 28/10/10.
DENOMINACIÓN DE ORIGEN: Navarra
TIEMPO EN MADERA: 12 meses en barrica de roble francés (55% nuevas).
EMBOTELLADO: 10.296 botellas. Septiembre 2012
Acidez total: 4.8 g/l
Acidez volátil: 0,46 g/l
Color: 9.7 Units.
Pago de Larrainzar es más que un vino. Es el alma de nuestra familia y el homenaje a esta preciosa finca y a sus jardines, donde los Larrainzar han vivido desde hace más de 160 años.
Nuestro Reserva Especial, el primer vino que comenzamos a elaborar en la añada 2004, representa el estilo de nuestra casa, en busca siempre de la elegancia y la armonía. Después de la vendimia manual, que se realizó a finales de octubre para asegurar la perfecta maduración de las uvas, las diferentes variedades y parcelas fueron vinificadas y criadas en barrica por separado. Solo entonces decidimos el ensamblaje final, buscando siempre el protagonismo de la fruta en equilibrio con las notas tostadas.
Un vino amplio, sabroso y carnoso, de elegancia y vivacidad y lleno de matices.
Color: Rojo rubí, limpio y brillante.
Nariz: En un primer momento muestra aromas de su crianza en barrica, como tabaco de pipa, cacao y madera limpia. Pasa luego a una gama aromática más madura y compleja, con notas de ciruela seca, mermelada de mora, tierra húmeda, arbusto, tomillo seco y bosque, mostrando su lugar de nacimiento.
Boca: Seco, con paso fluido y fresco. Se abre en el centro de la boca donde resaltan las notas de fruta madura, madera y trufa. Su intensidad aumenta a lo largo de la degustación. Sus taninos dejan una sensación ligeramente terrosa, pero son finos y elegantes. Destaca su buena acidez, que asegura una buena evolución en botella. El final de la cata nos habla de un vino suave y redondo.